Mark Twain es uno de los escritores que mejor ejemplifica las contradicciones de su tiempo, su ingente confianza en los proyectos tecnol&oacute;gicos de la &uacute;ltima mitad del siglo XIX chocaba con su escepticismo y desilusi&oacute;n que el mismo progreso le causaba. Publicado en 1889, &quot;Un yanqui en la corte del rey Arturo&quot; es el fiel reflejo de esa dicotom&iacute;a. Empieza burl&aacute;ndose y satirizando el pasado medieval y acaba cuestionando la superioridad del presente moderno e industrializado.<br /><br />Tras sufrir un golpe en la cabeza, de manera inexplicada e inexplicable, el yanqui de Twain es transportado hacia atr&aacute;s en el tiempo y arrastra consigo todo el conocimiento tecnol&oacute;gico del siglo XIX y su ideolog&iacute;a republicana y protestante.