&ldquo;El mis&aacute;ntropo&quot; (o <i>El atrabiliario enamorado</i>) es un drama de Moli&egrave;re escrito en 1666 en el que se refleja a trav&eacute;s de Alcestes, protagonista de la obra, el desagrado que el autor sent&iacute;a hacia el g&eacute;nero humano y la sociedad del momento.<br /><br />Alcestes ocupa todo el escenario: odia su tiempo, odia los versos de Oronte, tiene un pleito por unos rumores que hacen correr sobre &eacute;l. Y como enamorado, parad&oacute;jicamente, no cesa de reprochar los defectos a su amada (de lo cual ella hace broma) ni soporta a los dem&aacute;s pretendientes que la asedian; sus celos montan guardia permanente y sufre la presencia de cualquier galante hasta el extremo de olvidarse de su misantrop&iacute;a cuando el amor se apodera de su coraz&oacute;n.<br /><br />&quot;El mis&aacute;ntropo&quot; es una creaci&oacute;n singular para la &eacute;poca. Los personajes principales de la obra pertenecen a la aristocracia, pero su comportamiento no sirve, como en las tragedias cl&aacute;sicas inspiradas en las monarqu&iacute;as e imperios, para resaltar las virtudes de la nobleza. &quot;El Mis&aacute;ntropo&quot; hace funcionar un sal&oacute;n aristocr&aacute;tico en donde se debate el juego de las apariencias o de la hipocres&iacute;a. Alcestes, el enamorado atrabiliario, es un h&eacute;roe ambiguo y, como todos los h&eacute;roes, la invulnerabilidad de sus normas &eacute;ticas se ve amenazada por el punto vulnerable de sus sentimientos amorosos. Un coro de intrigantes, fatuos, hip&oacute;critas, chismosos y vanos cortesanos act&uacute;a como contrapunto de Alcestes, y las figuras de Filinto y Elianta constituyen el puente de prudencia y sabidur&iacute;a, como portavoces del propio Moli&egrave;re.<br /><br />Partiendo de un mito antiguo, Moli&egrave;re logra componer esta ambiciosa obra de gran comicidad, que trata temas universales que resultan tan vigentes hoy como lo fueron entonces, y que sigue siendo lectura imprescindible para cualquier buen lector.