Wilkie Collins, considerado por muchos como el padre de la novela policíaca y de intriga moderna, nos ofrece en "Armadale" una de sus novelas más completas y una de las cúspides de su obra.


En 1832, en un balneario alemán, un hombre llamado Allan Armadale, ya en su lecho de muerte, confiesa que muchos años atrás mato a un hombre que llevaba su mismo apellido: un hombre que fue su amigo y luego su enemigo y cuya muerte le ha pesado y perseguido toda su vida. Ahora, en su testamento, le deja a su hijo una grave advertencia: debe mantenerse apartado del hijo del otro Armadale o una maldición caerá sobre ellos y la tragedia volverá a repetirse.
Pero veinte años después, a pesar de las advertencias del padre, ambos jóvenes, hijos de la víctima y el verdugo vuelven a encontrarse, se harán amigos, y, una vez más, la herencia maldita volverá a perseguirlos.


"Armadale" es un complicado melodrama, rebosante de suspense, intriga y golpes de efecto, que sirve al autor para desarrollar el problemático de la identidad y la amistad. La problemática social de la época victoriana, la soberbia elección de los personajes, y sobre todo un villano como Lydia Gwilt... con estos hijos, Wilkie Collins teje una trama envolvente y seductora que brega entre identidades confusas, maldiciones heredadas, rivalidades amorosas, espionaje y asesinatos.

Se incluyen 23 ilustraciones originales de George H. Thomas rescatadas de la edición de 1888.

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Wilkie Collins (Londres, 1824-1889) Fue novelista británico, y está considerado como uno de los precursores, si no el creador, de la novela policíaca. Fue amigo y colaborador de Charles Dickens, además de editor y pintor. 
"Armadale", junto a "La Piedra Lunar" y "La Dama de Blanco", cierra una suerte de trilogía policíaca victoriana que convirtió a su autor, en uno de los más famosos de su tiempo.