De la Pampa a la Patagonia, de la Patagonia a la Tierra del Fuego, a lo largo de seiscientas leguas de camino &ndash;y veinte millas de mar por medio&ndash; avanzan <b>historias de amor y desamor, ajustes de cuentas, traiciones, heroicidades y cr&iacute;menes que se lleva el viento andino</b>. Pasan de un oc&eacute;ano de pastos a un secarral inclemente, y de ese desierto pardo a los verdores coronados de nieve que hiende el Estrecho de Magallanes.<br /><b>Para contar esas historias el narrador se detiene sobre los paralelos 29, 37, 41, 46, 52 y 55 de latitud austral,</b> pero todas conforman una historia completa, que supera los paralelos. <b>En cada una surge un misterio que se explica en la siguiente</b> con personajes que van hacia el sur, hasta alcanzar &ldquo;la acabaci&oacute;n de la Tierra&rdquo; como escribieron los primeros navegantes.<br />Los rusos conquistaron el Este, los norteamericanos el Oeste. <b>Los argentinos, criollos o inmigrantes, conquistaron el Sur</b>. Xavier Alcal&aacute; retrata lugares y ambientes que conoce bien, recoge sucesos que ir&iacute;an quedando en la memoria de los descendientes de los conquistadores y de unos ind&iacute;genas que <b>vieron venir el fin de sus tribus con el presagio de la gran luz celestial</b>. La Historia tambi&eacute;n se puede se puede condensar en las novelas: Latitud Austral es muestra de ello.